martes, 1 de diciembre de 2009

Héroes de moral férrea dibujados en sepia: Second to None, por Arizona Baby



Lo mío con Arizona Baby fue amor a primera vista. Desde la primera vez que les vi en directo, en noviembre del año pasado, he estado esperando este disco como ningún otro. Después de ese concierto les abordé y me compré Songs to Sing Along, que aunque calmó mi ansia por volver a oírles, no hacía justicia a lo que acababa de ver. Entonces los Arizona se encontraban moviendo su segundo disco. Ha pasado casi un año, pero la espera ha merecido la pena.

El sábado pasado Arizona Baby tocaron en El Búho Real. Allí nos desplazamos la crew de Mordor Sonoro con el doble propósito de entrevistarles y ver el concierto. Al final ni lo uno ni lo otro. Para el concierto estaba todo vendido y la entrevista la tuvimos que aplazar a diciembre, por falta de tiempo. No fue del todo tiempo perdido, ya que les pude comprar Second to None, un disco que ya me sabía casi de memoria de tantas veces que lo he escuchado en mi mp3.

«Shiralee» abre el disco y, con él, la caja de Pandora. Imposible resistirse. Recuerdo perfectamente lo mucho que me gustó esta canción la primera vez que la escuché, cuando Arizona Baby tocaron de teloneros de Diamond Dogs en El Sol (concierto que reseñamos en Mordor Sonoro). La guitarra hipnótica de Javi (¿una de 12 cuerdas, quizá?) y las percusiones de Marcos toman el ferrocarril de las 8:30 y se lanzan hacia adelante como un huracán. Entonces es cuando entra en juego Rubén, el tercero en discordia, echando vapor a través de sus seis cuerdas, dibujando volutas de humo blanco con su slide mientras la locomotora acelera.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...